viernes, 19 de agosto de 2011

Summer '11



Sentado en la blanca y negra sonrisa
del piano que vibra,
en las inumerables arterias
de música que tiritante arrastra
como las olas la arena
como el viento las nubes
como las estrellas el cielo
mi mente, a tu lecho,
sentado escribo.

Lejano canto que llena mi espíritu y colma mis fuerzas
me lleva contigo, ¿contigo?
no, con tu recuerdo,
a aquel cuarto solitario,
esas cuatro paredes
tan familiares para mi,
ese asilo donde mi alma busca recuperarse.

Melodia que eleva mi vello buscando la gota de rocio que tiempo ha se secó
la lágrima que tiempo ha se secó.
Busco, te busco,
en este sueño, mi realidad,
en esta lucha, mi vida,
eternamente perdida.

Música, como fuel que alienta mi calor,
te encontraré, lo sé,
te busco, te encontraré.
Volveré al lugar donde todo comenzó a caer,
a la llama donde ardió el papel,
a la carta que la pluma escribió.

Manchas de tinta me embriagan ahora,
no siento, pero tampoco quiero,
solo pienso, pienso en ti
y cedo mi yo al recuerdo,
mi conciencia ya no laterá
si no es en tu seno.

Aguanto, cortés la llama,
tu llama,
tu canción.

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