cuando la noche es fria y mis manos no responden,
a duras penas toco la guitarra sin afinar,
subo los graves bajo los agudos subo el reverb
y me caliento con notas semi-agudas.
es entonces cuando apareces ahi,
recuerdo tu tacto
tu cuerpo
y envidio el tiempo en el que la luz era cálida y te fotografiaba
tocando mi guitarra.
recuerdo el tiempo,
que sigue ahi, pasando como si nada,
como si todo
importase, o no.
y me hundo en estas melodías cargadas
hasta tocar fondo, solo.
la noche es fria
y las ilusiones se elevan como el humo disipandose
antes de llegar a ser nada, realidad.
...estos poemas,
que quisiera no haber escrito.
entre aliento y aliento,
vuelvo a la guitarra, enmimismado.
templanza.
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